En Mendoza podemos encontrar tres especies de zorzales que son nativos en la provincia, además del Zorzal Colorado que es considerada una especie recientemente introducida y naturalizada en áreas urbanas y suburbanas del Gran Mendoza.
Estas tres especies son fácilmente reconocibles por sus características y por los ambientes en donde se encuentran.
Zorzal Patagónico (Turdus falcklandii)
Es fácil de reconocer porque posee la cabeza y cola negruzcas y el pico y patas son de color amarillo anaranjado. El vientre es colora canela y los juveniles poseen el pecho manchado. Como lo indica su nombre, su distribución es patagónica y en Mendoza se lo encuentra frecuentemente en el sur de la provincia, en áreas de quebradas andinas.
Zorzal Chalchalero o Zorzal Gato (Turdus amaurochalinus)
La cabeza de este zorzal no posee una coloración distintiva como en el patagónico, posee el pecho ceniciento que se vuelve blancuzco en el abdomen, a diferencia del Zorzal Colorado que los posee color rufo. El pico en el macho es colora amarillo. Una característica de esta especie es el repetido balanceo de la cola cuando se detiene en una rama o luego de cortas carreras. Cuando canta hace una agudo maullido. Este zorzal es fácil de observar en parques y zonas de cultivos, en especial en viñedos y parrales.
Zorzal Chiguanco (Turdus chiguanco)
Es de mayor tamaño que los otros zorzales, su coloración es pardo negruzca en todo el cuerpo. El pico y patas son color amarillo anaranjado. Las hembras son más descoloridas, con tonos más pardos. Se posa en lugares visibles y suele ser confiado. Es fácil de observar en las quebradas precordilleranas (Villavicencio, Potrerillos, Las Vegas, El Manzano).
Muy buena explicación y excelentes fotos.
Gracias
Me gustaría escuchar el canto de cada uno, porque son muy distintos uno de otro, para poder distinguirlos. Tengo uno de ellos en mi árbol que canta todas las mañanas, invierno y verano.